jueves, 14 de junio de 2012

Sindicatos


Hoy llegó a mis manos este artículo que me gustaría compartir con vosotros.


ARTÍCULO DE PACO ROBLES / Madrid


"Una comida diferente

Pagó la última ronda de unas cervezas que le habían sentado divinamente después de una intensa semana de trabajo, se lo habían pasado bomba despotricando del viaje del Papa, de la hipocresía de la Iglesia , de todo lo que les pedía el anticlericalismo que los unía como la amistad que se profesaban y que les servía para estar colocados en la misma empresa pública de la Junta.

Se fue a casa para comer algo antes de echarse una buena siesta, pero de camino se encontró con un olor que lo llevó directamente hasta el paraíso efímero de su infancia. Un olor a cocido, a caldo humeante, el aroma que lo recibía cuando llegaba a su casa después del colegio, con su madre atareada en la humilde cocina donde la olla hervía sin cesar.

Entró en un local que le pareció un restaurante modesto, pero con encanto; iba distraído, pensando en el Informe Técnico sobre Prevención de Riesgos Psicosociales de las Personas Expuestas a Situaciones de Disrupción Económica Familiar que le habían encargado en la empresa pública donde trabaja. En realidad, no era un restaurante; sino un autoservicio frecuentado por gente de toda condición. Había personas ataviadas a la antigua usanza, junto a individuos solitarios que vestían según las normas alternativas del arte povera.

De pronto abrió los ojos y se quedó pasmado al comprobar que, quien le servía la comida en la bandeja, era una monja. Aquello era un comedor social y se vio rodeado de eso que nunca se nombra en los informes ni en los dosieres que prepara: pobres.

Quiso retirarse; pero la monja no lo dejó. Le sonrió y le dijo que no se preocupara, que la primera vez es la más complicada, que no debía avergonzarse de nada, que el cocido estaba buenísimo y que, de segundo, había filete empanado; que no se perdiera las vitaminas de la ensalada ni de la fruta, y que podía rematar la comida con un helado de los que había regalado una fábrica cuyo nombre obvió. Se vio sentado a una mesa donde un matrimonio mayor, y bien vestido, comía en silencio, sin levantar los ojos de la bandeja. Enfrente, un tipo con barba descuidada sonreía mientras devoraba el filete empanado y le contaba su vida; había perdido el trabajo, el banco se había quedado con su casa, después del divorcio no sabía a dónde ir; menos mal que las monjas le daban comida y ropa, y que dormía en el albergue bajo techo. «Al final, he tenido suerte en la vida, compañero; así que no te agobies, que de todo se sale…». No podía creer lo que estaba sucediendo. Nadie le había pedido nada por darle de comer, ni le habían preguntado por sus creencias. Se limitaban a darle de comer al hambriento, sin adjetivos.

Al salir, no le dio las gracias a la monja que le había dado de comer. Pero no fue por mala educación, sino porque no podía articular palabra. Una inclinación de cabeza. Ella le contestó con una sonrisa leve. «Vuelve cuando lo necesites y, si no estoy, di que vienes de parte mía. Me llamo Esperanza».

Pregunta:

¿Hay algún comedor social regido por los sindicatos?"


Espero que, al menos, reflexionen por un momento. Saludos

jueves, 16 de febrero de 2012

Garzón va, Garzón viene



"Constitución Española, artículo 1.1: Todo español, por el hecho de serlo, será también experto en economía, experto en derecho y entrenador de fútbol."

Así parece que comienzan los derechos de los españoles, (digo derechos, no deberes), pues visto lo visto, y tras comprobar que cualquier persona puede pronunciarse sobre cualquier tema ( y yo soy el primero que defiendo la libertad de expresión), pero siempre que uno haya estudiado/leído el tema en cuestión anteriormente.

Digo esto porque personajes como Pilar Bardem, su hijo, cejudos en general y Willy Toledo en particular, salen en los medios de comunicación apoyando a ultranza a Garzón, ese personaje al que ven como una víctima del sistema, un pobre señor al que, por ir contra los franquistas, se le ha condenado.

Y UNA MIERDA.


Señores, no seamos demagogos. Al Señor Garzón no se le ha condenado por eso, sino justo por lo contrario. 

En primer lugar, le han inhabilitado 11 años para trabajar como Juez, atendiendo escrupulosamente a lo que dicta la ley. Parece que a algunos sectores de la sociedad se les olvida que se le ha condenado por vulnerar un derecho a la defensa, principio básico en cualquier sistema democrático.

Y es que, no solo está la causa del franquismo ( "prevaricación: Delito que cometen los funcionarios públicos al faltar, a sabiendas o por ignorancia inexcusable, a las obligaciones y deberes de su cargo. "), sino las escuchas del caso Gurtel y los cobros del Santander.

En el caso Gurtel, escuchó conversaciones entre abogados y presos, lo cual está tajantemente prohibido por el art. 51.2 de la Ley Orgánica General Penitenciaria (LOGP), la cual establece que estas comunicaciones «no podrán ser... intervenidas salvo por orden de la autoridad judicial y en los supuestos de terrorismo».



Aquí hemos de preguntarnos:  Si alguno está en esa situación, ¿le gustaría que le grabaran las conversaciones? ¿ Te gustaría que no dejaran defenderte?. En mi caso, estoy totalmente de acuerdo con el Tribunal, que considera que ese comportamiento ha sido arbitrario, sin apoyo legal, que ha vulnerado el derecho a la defensa y que es propio de regímenes totalitarios.

Existen otras voces que opinan que por una simple formalidad, se le ha juzgado. Pero esas mismas voces no las escucho, y con esto hilo a su segunda causa pendiente, cuando se le ha considerado culpable de un delito de cohecho impropio. 

Efectivamente, esto tampoco se lee al abrir el titular del diario "Público", pero yo os lo cuento.

El "Juez estrella" se puso en contacto en diversas ocasiones con el ya citado Banco, para que le financiaran 302.000 Dólares que necesitaba para financiar su propio curso/jornadas de derecho iberoamericanas, durante el tiempo que estuvo en excedencia. Al reincorporarse, lejos de abstenerse por su relación con el Banco Santander, NO admitió a trámite una querella contra la entidad, dejando a los empresarios que presentaron la querella, privados del derecho de acceso a la justicia.



El asunto no acaba aquí, pues el Tribunal considera probado dicho delito, incluso lo declaran culpable, pero en un RESPETO al estado de derecho, (respeto del que careció este mismo Juez), dicen que el delito ha prescrito y aquí paz y después gloria, se va de rositas.

Lo más curioso de todo, es que personas como yo, que aún creemos en el derecho, lo vemos correcto, impecable, pues se hace caso a la Ley, la cual ha de ser igual para todos.

Del último asunto Garzón, no me gusta opinar en demasía, no por estar a favor o en contra, sino porque considero que ha sido todo una bomba de humo política, y, cómo no, le ha salido redonda. Como muchos sabréis, me refiero a la causa franquista. Es decir, que una persona, sin estar autorizada ni legitimada para investigar sobre un determinado asunto, lo hace.

Pero esto no termina aquí, pues el Señor Garzón archivó una denuncia contra Carrillo por Paracuellos, incluso abrió fosas comunes, y al encontrar fallecidos del bando nacional, mandó cerrarlas de nuevo.




Este tipo de detalles, corroboran que él no quiso perseguir las injusticias, sino crear polémica y seguir siendo referente en los medios de comunicación. No respetó la amnistía, abriendo viejas heridas, consiguiendo que los jóvenes de nuestra generación, se posicionen de un bando u otro, cosa que nunca debe ocurrir.

Sin más, me despido, esperando que esta sea solo la primera entrada de otras muchas.
Saludos